Sirvieron cordero en la boda de mi amiga.
Me dice mi amiga que yo soy el gestor de su hijo. No es que yo hubiera participado gozosa y físicamente en el dulce ardor de la concepción. No. Resulta que, según ella, una de mis brillantes, pragmáticas y poco obtusas ideas produjo el niño. Sencillo: cierto día sin poder evitar una entendible angustia me consulta- como quien le preguntara a un gran experto, a un mago o a un brujo- sobre cómo disimular ante su nuevo novio la falta del sello imperial. Según su reciente acusación gracias a mi respuesta -por lo demás realista, práctica y, no lo voy a negar, maquiavélica y desprendida de lo que algunos calificarían como consideraciones morales- ahora no sólo va a ser mamá, sino que se casó ayer, con su nuevo novio.Tal es el peligro incendiario de ciertas ideas, se ha visto que nada es más poderoso que una idea a la que le ha llegado su hora de alumbrar. El fruto de mi razonamiento y de mi análisis desprovisto de demasiadas consideraciones emocionales, es decir mi idea, que hasta ese momento no era nada más que algo enteramente abstracto y desechable se va a convertir, según cuentas, en un ser humano; yo soy, por lo tanto, algo así como el padre intelectual y soltero de esa criatura. Sólo a quienes somos del signo zodiacal de Virgo nos suceden este tipo de cosas. Sirvieron cordero en la boda de mi amiga. Me han acusado de muchas cosas y siempre me acusan de otras nuevas, desde ahora vislumbro nuevas lanzas dirigidas a mi costado: incitador, materialista, estructuralista, economicista o artista. Sirvieron cordero en la boda de mi amiga. Lo cierto es que debido a mi papel - no del todo voluntario, eso es algo que deben reconocer en mi beneficio- de manipulador, de poder detrás del trono, de regisseur de un triste sainete, no quiero interrumpir, ni juzgar al recién casado -persona buena de lánguidos ojos pardos-, hizo lo que cualquier hombre hubiera hecho en esa posición. Sirvieron cordero en la boda de mi amiga. Cuando en la calle lo encuentre de nuevo no podré dejar de tener un sentimiento de vana y malsana superioridad, no se dará cuenta de la intervención del largo brazo de mi mente en su vida, ni de mi secreta conferencia con su ahora esposa. Luego me reconvendré a mi mismo con esa rígida gracia que tenemos los masoquistas y fingiré no verlo a él, ni a su esposa color chocolate -mujer ardor de bravías connotaciones-, ni a su hijo que correrá feliz y torpe por la acera y no reconoceré en su lindo rostro infantil aires de pensador inútil atormentado por desinteligencias emocionales, ni de vano evocador de los consejos de turbios pensadores del Renacimiento, ni de ningún otro de esos rasgos con los que yo me podría identificar. Me veré acaso reflejado en la tranquilidad desbordada de sus ojos inocentes, en la paz inmensa de su mirada de niño, en la candidez sin límites de su sonrisa plácida; es que siempre ha sido una ventaja tener un himen elástico en mi conciencia.
9 Comments:
Jajajajja, muy bueno. Pobre cordero 'multitasking': primero lo casaron y luego lo sirvieron de cena...
Sí,mprimero lo "cazaron" y luego se lo comieron. Saludos Floriella.
Con esa "revelación" más de uno deberá revisar sus cifras.
Xoxen
A veces es mejor no saber,¿no lo crees amigo Xoxen?
¿y cual fue tu recomendación a tu amiga? podría sernos útil a más de una
Mi recomendación (absolutamente desinteresada, por supuesto) derivó al final en el niño pequeño, cuando lo veo me siento como el padre intelectual de esa criaturita.
Quizá, pero cuando se ha perdido la inocencia (mental) tampoco se puede recuperar.
Ahora, te creo lo de tu paternidad intelectual, pero sospecho que alguna reponsabilidad más que intelectual te cabe por la elasticidad que había alcanzado el susodicho sello real. No suelen tenerse ese tipo de confidencias con una simple amiga.
Xoxen.
Aunque, amigo Xoxen, para desventura de mi amiga la elasticidad estaba en mi conciencia y no en sus ortodoxias anatomicas. Y no seas intrigoso, que ya lo dijo Santos Briones Cabalceta , ese gran poeta de Mojigatal de Nicoya: "En mejores comales he frito mis huevos". Ah no perdon, era otra la cita y ahora esta cosa no me deja borrarla. Creo que no era de ese gran vate (conocido como "el cisne de la peninsula") pero ahi te va: "Cada ladron juzga por su opinion". Por supuesto que si existimos hombres, que ha mucho honra(no relacionar con nada), ponemos nuestro hombro solidario y firme para la ayuda desinteresada, para el soporte invaluable y , si, desinteresado, de nuestra amigas, quienes saben que pueden contar con el apoyo , si desinteresado, y valeroso y saleroso.. En todo caso me ha dicho mi abogado que el dictamen que certificado con la firma autenticada de dieciseis psicologos, psiquiatras y brujos amazonicos la gravedad de mi fobia para con las agujas e inyecciones, es suficiente para librarme de cualquier examen de ADN. Pero, deja de ser tan mal pensado Xoxen.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Publicar un comentario
<< Home